Oasis Jazz U Festival: Homenaje a Paco de Lucía
Por Miguel Ángel Aguilar, @miguelzamacona
La tarde del 24 de febrero de 2014, Paco de Lucía jugaba con su hijo en su casa ubicada entre Cancún y Playa del Carmen, cuando comenzó a sentirse mal. Un malestar crecía y oprimía su pecho mientras esperaba a su amigo, el guitarrista Juan D´Anyelica que iba en camino para grabar unas canciones esa misma tarde. D´Anyelica llegó apenas tuvo tiempo de asistir a Paco para subir a su coche y trasladarlo al hospital, al que entró apoyado en sus brazos y donde murió horas más tarde, la madrugada del 25 de febrero. Es curioso que la muerte haya alcanzado a Paco en ese lugar, que amaba tanto y lo hacía sentir seguro, donde dedicaba largas horas a la composición y a la pesca. “Ese mar es el más bonito que haya visto” dijo alguna vez Paco de Lucía sobre el que fuera su hogar.
Paco de Lucía fue un compositor y guitarrista de flamenco, uno de los más grandes del que se tenga conocimiento y uno de los que más han influenciado a este género. Grandes músicos se formaron a través de colaboraciones en sus distintos proyectos. Paco se ganó el afecto de mucha gente debido a su sencillez y su autenticidad a la hora de tocar y también se ganó el respeto de grandes músicos de otros géneros, como Chick Corea y John McLaughlin con los que incursionó y experimento con el jazz flamenco.
La noticia de su muerte conmocionó a amigos y colaboradores, no era tiempo de que muriera, tenía sesenta y seis años y muchos proyectos por delante. No era tiempo. Después de un profundo duelo, amigos, y familiares eligieron entre muchos homenajes que se planeaban desde el mismo día de su muerte, uno que resultara especial, para ser el primero y el más importante.
La edición 2014 del Oasis Jazz U Festival en Cancún era el lugar indicado, por la cercanía y el cariño de Paco por esa costa del Caribe. Para esta edición se presentó un cartel especial que contaba con grandes músicos, todos relacionados de algún modo con Paco de Lucía, lo que sumado a la ubicación del evento, la Arena Oasis del mismo hotel en Cancún, creó una gran expectativa sobre el festival. 22, 23 y 24 de mayo serían los días en que se llevaría a cabo el homenaje.
Oasis Jazz U Festival
El 22 de mayo comenzó la presentación del festival, acompañada de una verdadera cátedra sobre el flamenco, algunas anécdotas y una breve reseña de la vida de Paco. Fue notorio desde el principio que uno de los temas recurrentes en torno a la vida del guitarrista, fue el gran amor y la pasión que sentía por esa región del caribe mexicano. Al finalizar la presentación se presentó Chuchito Valdés: Latin Jazz Quartet y Manglares: Fusion Latin Jazz Quintet. La participación de Chuchito Valdés fue muy interesante, ya que fue un sueño no realizado de su padre, el pianista Chucho Valdés, tocar junto a Paco, a quien admiraba profundamente.
Llegó el 23 de mayo y transcurrió entre un excelente día en la playa y una divertida y enérgica rueda de prensa con Paquito D´Rivera, que con una alegría desbordante y algunas anécdotas de su amistad con Paco, elevó las expectativas de su presentación. La Arena Oasis pareció un lugar agradable, bien conservado del calor y los mosquitos, un escenario bien iluminado y con un fondo de estrellas que daban una atmósfera casi solemne a la ocasión. La familia y los amigos de Paco estaban sentados al centro y al frente, rodeados de los medios invitados y Gabriela Canseco, la viuda de Paco, mostraba gratitud a aquellos ex colaboradores que se acercaban a platicar. El escenario se apagó y sólo recuperó su fuerza cuando Carles Benavent se paró al frente. Tras unas breves palabras en las que resumió su amistad con Paco, comenzó a tocar junto a su Jazz Trio. Tocó lo que para él fue el tema más representativo de Paco, “Zyryab”, e invitó al escenario a su ex compañero Jorge Pardo, quien dejó ver en adelanto su gran talento como músico. Cuando terminó la presentación de Carles, Juan D´Anyelica subió al escenario y habló largo y tendido sobre el significado e importancia de que este homenaje fuera cerca del mar de Cancún.
Paco de Lucía y Carles Benavent “Zyriab”
Antonio Sánchez y su Flamenco Sextet se apoderaron del escenario con una fuerza increíble. Entre canto, guitarra y baile transformaron completamente la atmósfera e hicieron que la fuerza de su flamenco opacara los rasgos de jazz anteriormente mostrados.
Pero el jazz regresó con la fuerza y la energía de una verdadero maestro del escenario. Paquito D´Rivera comenzó su presentación y dio muestra de su talento como clarinetista, saxofonista y su capacidad para combinar géneros musicales. Paquito se mostró capaz de enamorar al público con su maravilloso sentido del humor y sus comentarios acertados sobre la venta de sus discos al fondo del lugar. La potencia de su saxofón llenaba completamente el pecho de todos, en contraste con la calma y la dulzura que lograba sacarle a su clarinete, que según él, es una dama celosa, que grita mucho si no la tratas bien.
Para el 24 de mayo la emoción había crecido, en parte porque parecía muy complicado superar el espectáculo de Paquito D´Rivera, en parte también por la playa. El bajista mexicano Alonso Arreola subió al escenario y con su presentación dio toques frescos a la noche con algo de jazz sabor a rock.
José María Bandera hizo que el flamenco se hiciera de nuevo con el escenario y con cantos y baile provocaron la admiración y los gritos del público. Llegó después el que quizás fuera el momento más destacado de todo el homenaje, Jorge Pardo subió al escenario y contó una anécdota sobre su primer encuentro con Paco que dio paso a un gran solo de flauta. Lo más destacado de su presentación fue cuando invitó a todos los músicos que participaron en el homenaje a subir al escenario. Por un momento se convirtió en un gran director de orquesta que coordinó solos del bajo de Carles Benavent y de la guitarra de Antonio Sánchez.
Cuando finalizó su presentación sonó una voz que anunciaba el final del festival, pero el inicio de uno de los momentos más esperados. El “Faraón de la Salsa” Oscar D´León, estaba por subir al escenario. Oscar D´León dio un gran espectáculo desde el principio y el ritmo de su música comenzó a mover de inmediato, los cuerpos, aún sentados del público. Tras cantar el tema del compositor argentino Alberto Cortez , “Cuando un amigo se va”, e improvisar un blues dedicado a Paco, arrancó un verdadero espectáculo con luces y humo que convirtió a la arena Oasis en un verdadero salón de fiestas. A pesar del poco espacio, la gente(incluida la prensa y los amigos de Paco) bailaron por casi dos horas al ritmo de la orquesta de Oscar D´León. Así terminó el homenaje al legendario guitarrista, con una fiesta.
El festival fue muy completo, una verdadera fusión de estilos y de ritmos como pocas veces se han visto. Se vieron presentaciones especiales y colaboraciones entre músicos que muy probablemente no se repitan. Lo que se vivió en el Oasis Jazz Festival fue una verdadera integración y convivencia entre los músicos y el público. Encontrarlos en el lobby del hotel, en algún restaurante, en la playa y en las calles mientras buscan lugares para salir de fiesta es una experiencia muy peculiar.
La buena música se siente, sino se siente es que no es buena música, dijo Paquito D´Rivera durante su rueda de prensa. De igual modo a un gran músico lo reconoces cuando lo escuchas, si no, simplemente no lo es. Una cuestión muy personal, creemos. Los músicos que rindieron homenaje a la vida y la música de Paco dieron testimonio de su grandeza como músico y ser humano y después de este festival no queda duda sobre lo que representó Paco de Lucía para la historia de la música. Una verdadera leyenda.