La dependencia hacia los teléfonos celulares es innegable, es por eso que las relaciones humanas se han transformado drásticamente con el paso del tiempo y la convivencia interpersonal se ha ido perdiendo. En “La Voz Humana” somos testigos de una conversación amorosa/dolorosa a manera de monólogo, escuchando el lado femenino de dicha conversación y siendo partícipes de sus acciones y reacciones hacia lo que se escucha en el auricular.
Ésta es una obra original de Jean Cocteau, escrita en 1930 e incluso fue interpretada a manera de ópera en sus inicios.
Ahora, en esta adaptación a la tecnología telefónica en el siglo XXI, a cargo de Antonio Castro, vemos que las cosas no han cambiado mucho desde aquellos tiempos en cuanto a los problemas de telefonía. Dicho lo anterior por el hecho de que en la obra original se utilizaba como excusa el hecho de que la telefonía no estaba muy bien en Francia y por eso se “cortaba” la llamada, ahora los problemas son muy parecidos por cosas como “se me fue la señal”, “no entró la llamada”, “no tengo llamadas perdidas”, etc.
El monólogo es interpretado por Karina Gidi, quien logra perfectamente atraparnos en la vida amorosa del personaje y en su dependencia física y emocional hacia el teléfono celular porque lo ve como la vía para estar con su amado, a quien ha perdido después de cinco años.
La escenografía nos sitúa en el cuarto de “ella”, en el que vemos todo blanco y sin vida alguna, elemento que nos ayuda a entender la situación que vive en esos momentos.
Depender o no de un teléfono no nos hace más o menos “personas normales”, pero lo que no cabe duda es que ha sido una tendencia que crece a diario y nos lleva a cuestionarnos: ¿realmente las relaciones humanas siguen siendo humanas?
“La Voz Humana” se presenta en el teatro Orientación (dentro del Centro Cultural del Bosque) los días jueves y viernes a las 20:00, sábados a las 19:00 y 20:30 y domingos a las 18:00 horas hasta el 28 de abril, con excepción de la semana del 28 al 31 de marzo.
