Peso corporal, hambre, vanidad y locura. Una charla con Adriana Dorantes Moreno
La periodista y promotora cultural Miriam Canales platicó con la escritora Adriana Dorantes, ganadora del premio “Rosario Castellanos” por su libro “El Comienzo” de la XIV edición de los Juegos Literarios Nacionales Universitarios por parte de autoridades de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY).
Estrechamente ligados al ego, la pesadumbre y la locura, éste es el planteamiento del libro La costumbre del vacío, enfocado en un tono poético a los trastornos alimenticios, autoría de ésta joven pluma. (Libroobjeto Editorial, 2021).
“Se me ocurrió escribirlo en poesía porque es la forma en que me siento cómoda. Es un libro un poco raro, un poco transgresor en forma y no es el tema más poético que te puedas imaginar. Lo que me ayudó mucho a delinearlo fue la lectura que hice a principios de 2019 de “La belleza del marido” de Anne Carson que me voló la cabeza. Me di cuenta que podía hacer una propuesta poética que me dio la pauta. Esta sensación que me genera poesía es un poco incomoda, difícil, pero creo que nos ha sacado de nuestra zona de confort. Comer es algo con lo que vivimos a diario, pero está tan establecido que no se repara tanto en ello y lo que son los procesos y lo que se siente y te duele y tener años y años de intentar y fracasar y nunca ser suficientes, nunca ser una historia de éxito, pero al mismo tiempo es algo sincero y podría funcionar como un libro de poesía. Estos detallitos antipoéticos, como las medidas, los gramos, centímetros.
Me recordó a Réquiem por un sueño, incluso mencionas al personaje de la mamá del protagonista. Siento que va en esta misma línea y veo que tuvo un impacto en tu vida y pluma.
Me gusta mucho la película porque las adicciones vienen de maneras insospechadas, o no cómo las imaginamos. En esta película está como tema principal las drogas comunes, pero me llama la atención como la mamá se hace adicta a las pastillas para bajar de peso porque no puede llevar simplemente una dieta, porque se muere de hambre y se trastorna y empieza a alucinar. Estos medicamentos fueron permitidos como cualquier cosa y no se requería receta en muchos casos.
La figura de esta señora me conecta con el epígrafe que puse de la argentina Alejandra Pizarnik que se hizo adicta a un montón de cosas como somníferos y comenzó sus adicciones porque empezó a tomar anfetaminas para bajar de peso, se sentía gorda. A mí me impresiona que en sus diarios habla de estos problemas que tenía con la comida y el miedo y pavor a engordar y la culpa que le daba comer, que debería ser algo natural para sobrevivir y de alguna forma se ha torcido en aras de tener cierto cuerpo y llenar ciertas expectativas. Me llama la atención como ella lo padeció, por eso lo quise poner en un poema. Esta privación de los alimentos después de meses de estar a dieta y comer ciertas cosas, aunque te quedes con hambre, te vuelven un poco loca y si tienen éxito no se pueden sostener a largo plazo.
También mencionas aquí a Nahui Ollin, un cuerpo aparentemente perfecto, una de las mujeres más hermosas de su época, toda una musa y el personaje aquí se compara con ella en cuanto a que le encanta su figura, pero que a la vez se siente intimidada.
Lo de Nahui Ollin fue uno de los más personales y muy catártico que vi en el MUNAL en 2018, y es una suerte de comparación de cómo es la belleza y como una mujer bella puede dejarse retratar sin ningún problema frente a gente, pero que no es feliz de verse en un espejo. Creo que a pesar de que era muy bella tenía sus propias dudas y problemas. La base de ese poema sí que es una confrontación. Si eres hermosa vas a flaquear en otra cosa, si eres rica o inteligente vas a flaquear en otra. Me pongo a cuestionar si la belleza externa tampoco es suficiente, si nunca vamos a llenar todas las expectativas que hay, todas las exigencias que nos hace alguien que no somos nosotros.
Adriana Dorantes es Maestra en Literatura Hispanoamericana y autora de los libros Vendrá la muerte y tendrá tus ojos (2014), Quién vive (2012), Entre mares alados (2014), ¿No habrá puerta de salida? (2016) y La costumbre del vacío (2021). Desde 2020 escribe la columna quincenal “Pequeñas magias inútiles” en Los Ojos del Tecolote. La costumbre del vacío es un peculiar ejercicio poético, por momentos incómodo y sórdido, acerca de cómo perder peso y la abstinencia pueden provocar todo un caos interno. Autora entusiasta del existencialismo y lo oscuro, esta es su nueva entrega.
“La costumbre del vacío”
Adriana Dorantes Moreno
Año: 2021
Editorial “Libro Objeto”