En cualquier festival el primer día es de incertidumbre y expectativa. Todos quieren llegar y hacer el reconocimiento necesario, ubicar cada escenario, barra y baño para no desperdiciar ni un segundo de la experiencia.
El Grant Park es una gran sede, tiene pasillos amplios para que los miles de asistentes recorran sin problemas el festival, tiene suficiente espacio para que los distintos escenarios convivan sin interferencias y tiene una vista impresionante de varios de los edificios más bellos de la ciudad.
Algo interesante de este año tiene que ver con sustentabilidad ya que toda el agua que se vende viene en cajas en lugar de empaques de plástico. Aunque no es uno de los festivales "hippie" por excelencia, es impresionante ver la atención que le ponen a estos detalles y lo comprometidos que están los voluntarios del festival por las causas ecológicas.
Al ver los horarios del festival y la cantidad de escenarios que tiene, pareciera que hay una sobreoferta, pero en realidad todo está orquestado para ver la mayor cantidad de actos posibles. Incluso está planeado para que las bandas más importantes sean vistas solo por sus fans... No es coincidencia que Black Sabbath haya tocado minutos después de M83 al otro extremo del parque y que después The Black Keys mantuvieran a la masa lejos de Ozzy, Iommi y Butler.
Así estuvo mi primer día en Lolla:
Tame Impala @ Sony Stage: Los australianos tocaron un set pulcro y al grano. Aunque fueron de los primeros actos importantes en el festival, tenían un público abundante y entusiasta. Se mostraron confiados en todo momento y su Innerspeaker ha madurado muy bien. No solo se escuchan como parte de otra época, sino que también parecen sacados del pasado: pelo largo con bandanas, camisas con horribles estampados e instrumentos que dejan ver unos buenos años de uso. La mejor canción del set fue "Apocalypse Dreams", primer sencillo de su próximo álbum Lonerism. Tame Impala sabe que su éxito está enla parte más densa de sus creaciones y parece ser que han encontrado la fórmula para hacer canciones largas y complejas que suenen a hit. Sin embargo, no es la mejor banda para ver sobre un escenario. Sus grabaciones son tan buenas que las dejan intactas al momento de hacer versiones en vivo; verlos es escuchar lo mismo que su trabajo de estudio, no hay que esperar más y no te van a defraudar.
Madeon: Hugo Pierre, mejor conocido como Madeon, es un productor francés de 18 recién cumplidos con las habilidades de Girl Talk y la destreza brutal de Araabmuzik. Madeon fue uno de los primeros actos de Perry's, lo que antes era la"carpa de electrónica" se ha transformado en un escenario monumental que responde a la popularidad de la EDM en Estados Unidos. Madeon esun arma de destrucción masiva, fusiona los mejores ganchos del pop vigente con "drops" pesadísimos como buen acto enfocado al dubstep. No me imagino ver algo así en México, pero me ha quedado claro que el rave está de regreso
Die Antwoord: Lo mejor del primer día, sí mejor que Sabbath. Aunque los sudafricanos tocaron en un escenario pequeño, lo tenían a reventar... La gente corría sin control para llegar al escenario pirque sabían que estaban a punto de ver algo insano. Me recuerdan a Crystal Castles en sus inicios, música que suena "horrible", una estética de mal gusto, nadie los entiende bien, pero todos bailan entran en frenesí al escucharnos. Albinos sudafricanos del ghetto al límite de la vulgaridad sobre el escenario. Son un acto muy bien armado, Ninja y Yo-Landi tienen sincronizadas a la perfección las intervenciones de cada uno con su DJ. Ninja es como un Latin Lover incómodo que luce suvirilidad ante todas las presentes. Yo-Landi es un súcubo con flow, maldad pura y rimas fieras que pusieron al público a sus pies... las rimas y el generoso espectáculo de carne que ocasionalmente muestra a sus fans. Si algún día el mundo acaba en una escena como el rave de Matrix Reloaded, estaremos escuchando a Die Antwoord. Si tienen planeado ir al Festival Corona Capital deben verlos, les guste o no, es algo que tienen que ver.
Band of Skulls: Es la segunda vez que tengo la oportunidad de ver a Band of Skulls y ha sido la mejor. Band of Skulls es una banda de rock, simple y contundente. Les tocó un escenario pequeño y eso les vino bien porque los que estaban ahí conocían su trayectoria y estaban muy felices por verlos. Son The Kills sin la decadencia, White Stripes versión bar, tienen el potencial para convertirse en una de las bandas de rock más grandes del planeta, pero aún no se dan cuenta.
Nero: Este trío británico es uno de los más importantes en el EDM del otro lado del charco. Tuvieron al Perry's fuera de control justo al atardecer. Quizá fue el mejor momento del Perry's en todo el día, al caer la noche los animales raver nocturnos que ahí habitan ya están demasiado salvajes, pero al atardecer los puedes ver en su máximo esplendor: aros hula hula con LED's, plumajes, pieles, cascos... nada es demasiado raro. Las chicas en bikini y los muchachos con el torso desnudo y todo tipo de estupefacientes a la vista. Lo malo de Nero fue que estaban anunciados como Live Act y sonó a DJ Set, se dedicaron a hacer un mix de fiesta con éxitos de bandas como Yeah Yeah Yeah's, en lugar de interpretar su propio material. Para ser una banda cuya música aparece en comerciales populares, que también estuvo presente en Coachella y tienen el aval de medio Inglaterra como algo gigante, dejaron mucho que desear.
Black Sabbath: Ver a Ozzy Osbourne, Tony Iommi y Geezer Butler en el escenario hizo que valiera la pena el viaje. A Ozzy hay que aplaudirle cada día que se pare de la cama y cuando llega al escenario es un héroe, el tipo a duras penas puede hablar y estoy casi seguro de que usa un prompter en los conciertos; sin embargo conserva su voz. En la mitad del set Ozzy estuvo impecable, poderoso, tal y como lo queríamos escuchar, pero en la otra se oía cansado, mal. Para mí ver a Black Sabbath fue la oportunidad de ver a Tony Iommi, con todo y su dedo falso, hacer magia negra con una guitarra. Iommi probablemente sea mucho mejor guitarrista que hace tantos años, toca con calma, no se ve apático, solo relajado; no le da miedo su guitarra, la domina. Butler también lo hizo como los grandes, si bien no es un virtuoso como Iommi, es uno de los pocos bajistas que muestran una personalidad destacada en el escenario. El set tuvo lo que tenía que sonar, las caniones que todo el mundo conoce y otras que los hicieron una de las bandas más importantes de la historia. Una lástima que el público más joven haya preferido irse a ver el combo M83 / The Black Keys, porque Sabbath está de regreso y lo que pasó el viernes 3 de agosto en Grant Park quedará como un momento histórico irrepetible.
La cobertura especial que hacemos Daniel Moad, Fo y yo desde Lollapalooza para Ibero 90.9 es posible gracias a Sony México y todo su equipo, agradecemos enormemente todas las facilidades que nos otorgaron para brindarles información de primera mano sobre uno de los festivales más importantes del mundo.