Texto por Miguel Valdivia
Soy nuevo en Morelia. Ésta es apenas la segunda vez que puedo pasar una de las mejores semanas que cualquier cinéfilo puede tener en nuestro país, y pues es que ya me encuentro en mi cuarto de hotel escuchando un poco del soundtrack de Drive, feliz de estar en la décima edición del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM).
Fue un día largo. Empezó con la develación de la placa donde participaron Gael García Bernal, Daniela Michel, directora del FICM, Abbas Kiarostami, Sally Potter, Thierry Fremaux, director del Festival de Cannes, Pablo Larrain, entre otros... Es decir: la pura miel.
Con todo y todo, la verdad es que el primer día del festival -al menos para mí- se trató de No, la nueva película de Larrain protagonizada por García Bernal, que nos lleva a Chile en el año de 1988 para contarnos la historia de René Saavedra, un creativo publicitario que estuvo detrás de la campaña que derribó a Pinochet.
Después de una su conferencia, llena de temas políticos por la naturaleza del filme, llegamos al Centro de Convenciones para la Alfombra Roja. Pero mejor hablemos de la película. A pesar de que es realmente buena, cuenta con un error, y es algo a lo que Larrain se refirió en la conferencia como uno de los grandes problemas a la hora de consolidar el largometraje: el reunir toda la información obtenida durante la investigación en un único guión. Parece extenderse más de lo que debería durar y hay algo dentro la construcción de la historia que simplemente no te acaba de amarrar.
Por mucho que les duela a algunos, Gael hace un muy buen trabajo y Larrain le otorga el espectador una experiencia visual orgánica, pero sin llegar a parecer pretencioso o forzado, lo cual es acompañado de una fotografía increíble que en verdad nos remonta a la década de los 80.
Esto fue un poco de lo que vi el primer día de 9 que estaremos aquí en Morelia.
Esperen, que esto se va a poner muy bueno.