Por: Alan Luna (@AlanisMoon) El pequeñito y consentido Jesús ha hecho su aparición otra vez. Con "Azul" ya colocada como una de las canciones del año, Little Jesus brinda dos cortes que sirven como adelanto de su ya ansiadísimo debut que llevará el título de Norte.
Comencemos con "Color". Con rápidos puntilleos y un acelerado ritmo, "Color" es una bonita pieza que recuerda al primer y memorable álbum del Vampire Weekend. Los tonos vocales que ya se van haciendo tan conocidos en el panorama nacional, son bien aprovechados por el tropipop de la melodía. "Vamos a aceptar/ Somos como audífonos sin conectar" y otras frases que le atinan a una poesía cotidiana efectiva que pronto se hará memorable, hacen su aparición con un coro que después de una o dos escuchadas permanece inconscientemente, para romper en un pequeño cierrecillo épico a muchas voces que en vivo sonará en la garganta de muchos amigos.
La segunda rolita, "Cretino", tiene un corte más clásico. Rockero. El riff que lleva la canción, el cambio rítmico con el bridge que nos prepara al coro que es una advertencia hacia alguno de esos muchos "gallinas" esparcidos por el territorio —al que le quede el saco que se lo ponga. Es la rola para dedicarle al güey que ya no soportas, al que cada vez que encuentras quieres eliminar —o arrestar, si tomas el buen camino de la legitimidad. Y el cierre, de nuevo, con una multitud entonando las palabras a aquel cretino. Chuladas de appetizers para abrir boca al plato fuerte —el elepé terminado— que seguramente será brutal.
Por cierto, dos de nuestros consentidos estarán presentándose el viernes en el Imperial celebrando un año del pequeñuelo Jesús, en un cartel del que el Mercado Negro fue —directa o indirectamente— parte de la planeación:
LITTLE JESUS + BIG BIG LOVE... y PIZZA
¿QUÉ MÁS PODEMOS PEDIR?
Vamos, aunque no les garanticemos la fama.