Día 5. Gael García Bernal a cuadro.Inicia el viaje de regreso.
Aunque el festival de cine de Locarno continua todavía hasta el domingo próximo -no sólo es uno de los más antiguos si no también uno de los mas largos con 11 días de duración- yo emprendo el viaje de regreso a México con escalas en Milán y Madrid. Estos 6 días han sido suficientes para ver mucho buen cine, sorprenderme con las espectaculares proyecciones de la Piazza Grande, deslumbrarme con la belleza del Lago mayor y aprender mucho sobre la complejidad de Suiza como país. Justo ahora que escribo este texto todos los reflectores del festival vuelven a voltear a México en el homenaje que le rinden los organizadores y la firma champañera Möet Chandon a Gael García Bernal. Agendado como el evento más importante del día -a las 9:30 de la noche en la Piazza Grande con su pantalla gigante y sus 8000 sillas- el reconocimiento es mucho más que la cortesía de una marca con un famoso. Detrás de él está el status de figura internacional que ha construido García Bernal a fuerza de talento, de trabajar bajo las órdenes de directores de la talla de Walter Salles, Pedro Almodóvar, Lukas Moodysson, Jim Jarmusch, Fernando Meirelles, Iciar Bollaín, Alfonso Cuarón o Michel Gondry y de promover el cine desde diferentes trincheras. Cuando ayer comentaba por aquí que el cine y los festivales necesitan de las estrellas no caía en la cuenta de que la siguiente figura sería un mexicano al que Locarno considera a la altura de los mejores del mundo.Para confirmarlo, valdría la pena revisar que este año han desfilado por la Piazza personajes como Alain Delon,Ornella Mutti,Charlotte Ramplig o Leo Carax. De ese tamaño es la cosa. En el marco del homenaje se proyectará el más reciente éxito de Gael como intérprete, la cinta "No" del realizador chileno Pablo Larraín, una muestra más de la inteligencia del actor para escoger sus proyectos y su gran capacidad de adoptar acentos y construir los personajes más diversos (de un cura con conflictos morales a "charolastra" desenfrenado pasando por travesti resentido, revolucionario viajero o director de cine obsesionado. Sin duda, su papel de René Saavedra, famoso publicista chileno que desarrolló la campaña que ayudó a derrotar a Pinochet en el pleibiscito de 1988, colaboró para que la cinta se alzara con el premio de la quincena de los realizadores en el festival de Cannes de este año. Finalmente el cine se trata de eso. De sumar talentos y asociarse creativamente con tipos inteligentes e innovadores para conseguir buenas películas y desarrollar nuevos proyectos. No encuentro una mejor manera de terminar esta cobertura que alegrándome por el éxito de un mexicano talentoso como muchos de los que han pasado este año por Locarno. Les platico en unos días donde terminan los premios pero les adelanto que con las 7 cintas de "Carte blanche", el premio a "Las lágrimas", Nicolás Pereda compitiendo por el Leopardo de oro y el homenaje a Gael México ganó mucho. Yo por lo menos me siento muy afortunado de ser testigo y de poder compartirlo con ustedes.Gracias por acompañarme. Nos podemos ver en muchos lados pero seguro seguro, nos vemos en el cine. El More.