Ayer me acompañó a varias aventuras. Ella podrá contar al final de viaje que la hice conocer de todo un poco. La llevé en un solo día a una parte colonial de la ciudad, a una playa y al FIFA Fan Fest, una vez más. Y es que es el punto de reunión para los feligreses de la pelota mundialista. Griegos, Italiano, Americanos, Alemanes, Japoneses, Mexicanos y de todo un poco llegan ahí. Así como ella y yo. Llegamos primero a Recife Antiguo. Qué ciudad, qué bruto. No lo podía creer. Es una verdadera belleza. Luego de tomar fotos, pasearla y caminar en aquellos bellos espacios, nos fuimos a descansar una vez más a la playa tan tranquila que nos invitó ya varios días a hospedarnos entre sus olas. La Brazuquita y yo, nos sentamos en una silla de frente al mar, con una sombra perfecta y un viento sutil. La botan y la bebida fluyeron, cuando se nos ocurrió relajarnos y divertirnos con otros contendientes que nos pidieron a ella para dominarla. Accedí sin celarla y porque supe que le haría bien, un poco de lo suyo.
Se nos cruzó un pao de queijo, pan de queso, que es la fritanga por excelencia de todo Brasil. El empanizado y el queso te lo ofrecen por todos lados y a todas horas. Vaya a donde vayas, será la especialidad de la casa.
Para ver el juego de Alemania vs. Gahana, nos encaminamos al Fan Fest. Ella venía un poco cansada, pues jugaron con ella. Pero a la buena, no a la mala. Fue una tarde tranquila después. Algún refresco y algo más por ahí. Esperar a que el tiempo se consumiera mientras Alemania sufría y complicaba su calificación. Aunque aún la tiene muy fácil.
El día seguía y la Brazuquita nos esperó en casa, llego la hora del juego. De lo lúdico, digámoslo así. Salimos a distraernos en la noche con nuestros compañeros y ella tuvo que aguardar. Ahí en su lugar viendo como me alejaba y me iba de ella para dejarla solo un poco descansar. Hoy pinta un día diferente. El nervio tricolor nos acompaña a los dos y por eso estamos nerviosos. Sin saber que ocurra. A la expectativa de lo que pueda ocurrir. Será un nuevo amanecer.