No sé si se debe pronunciar Bella, o Bela, pero este post se trata de una perrita que fue atropellada y rescatada en la carretera. Bella necesita ayuda para cubrir sus gastos médicos, pero también necesita un lugar dónde vivir. Si estás interesado en adoptar o donar, envía un correo a Verónica Molina: vmom1010@gmail.com.
Verónica es quien la rescató en la carretera... les dejo la historia de Bella tal y como ella me la contó.
Un día después de la navidad, manejaba en la carretera Chamapa-La Venta cuando a lo lejos vi a dos perros tratando de cruzar la carretera. Adelante de mi venía una camioneta a unos 120km por hora y así, sin más, vi como atropelló a uno de ellos, fue algo muy impresionante, escuchar el ruido, había humo, ver salir una bola de pelos por debajo del coche y ver rodar a un ser vivo en medio de la carretera.
Mi reacción fue orillarme y voltear por el retrovisor y entonces vi que esa bola de pelos en medio del carril de baja alzaba la cabeza y pensé: la van a volver a atropellar. No dudé en bajarme corriendo a tratar de ayudarla.
Me di cuenta que era un perro cachorro, pero grande, lo primero que hice fue jalarlo con mucho cuidado para que no lo volvieran a atropellar, había mucha sangre, pero me miraba y me pedía que no la fuera a dejar. Tenía mucho miedo de subirla a la camioneta y lastimarla, o no poder cargarla, pedí a varios coches que se detuvieran para ayudarme a subirla pero nadie lo hizo fue entonces cuando no sé de dónde saque fuerzas, la cargué y la metí a la cajuela, lo único que ella hizo fue agradecerme con la mirada.
El camino a la veterinaria se me hizo eterno pero llegamos, yo no dejé ni un minuto de hablarle a la perrita y pedirle que resistiera, que pronto la curarían.
Cuando llegue a la veterinaria tenía mucho miedo de abrir la cajuela y que estuviera muerta, pero no fue así, bajé corriendo a pedir un doctor, la cargaron, e inmediatamente le pusieron suero para estabilizarla y la empezaron a revisar, ella seguía sangrando mucho, se veía muy débil y asustada.
Lo primero era que se estabilizara para así poder proceder a los estudios y ver por qué sangraba. Después de tremendo golpe fue sometida a un ultrasonido que reveló una hemorragia interna de vejiga, la cual me explicaron se absorbería y poco a poco dejaría de sangrar. La perrita presentaba mucho dolor en una pierna, por lo que se le sacaron unas placas las cuales indicaron que tenía fractura de fémur.
Bella, como la bauticé, tiene apenas unos 5 meses, por lo que se tomó la decisión de no operarla y esperar que su hueso solde por sí solo teniéndola inmovilizada. Hoy cumple 9 días encerrada en una jaula.
El futuro de Bella es incierto, hoy es una perrita, asustada, lastimada y sola, y lo único que refleja su mirada es mucho miedo y dolor.