La primera vez que vi a La Bien Querida, fue el 25 de mayo de 2010 en El Imperial. Llegué temprano y, para ser honesta, no sabía de qué rayos iba esto. Atravesaba por una de esas etapas por las que creo todos pasamos: escuchar discos que te regalan y terminar enamorándote de ellos.
Así me pasó con el rock-pop-folk español y sus derivados. Recuerdo que hasta leí un libro de Jesús Ordovás llamado La Revolución Pop, el cual hablaba de las películas de Almodóvar, las canciones de Alaska y Los Pegamoides, Radio Futura, de toda La Movida Española. A La Bien Querida sólo le conocía un tema, “De momento abril”, una canción melancólica, triste, con la que me identificaba en ese momento. Meses después de ir a su concierto, me arrepentí de no haber indagado más sobre ellos para aquella noche.
Con La Bien Querida, su vocalista, Ana Fernández-Villaverde acumula preciosas melodías pop-folk desde el 2009, tanto en su disco Romancero, como en el Fiesta. Canciones que transmiten melancólicas experiencias de amor y desamor que son acompañadas con la producción de su compañero David Rodríguez, líder de otros proyectos musicales como Beef y La Estrella de David.
Su más reciente producción, Ceremonia, va más allá y da un cambio drástico en la atmósfera a la que nos tenían acostumbrados. La sofisticación de la banda se da a través de temas envolventes y beats que nos pondrán a bailar. Platiqué un poco con Ana sobre Ceremonia, y esto es algo de lo que me dijo:
Gabriela: ¿Qué vamos a experimentar con Ceremonia?
Ana: Emociones fuertes. El mismo tipo de canciones siempre vestidas con sintetizadores, arpegios y ritmos repetitivos. Es un disco influenciado por la música siniestra de los 80, el kraut-rock y el tecno-pop.
G: “Ceremony” fue una de las últimas canciones de Joy Division, después New Orden la utiliza como sencillo realizando algunas adaptaciones. ¿Tiene algún significado personal el haber elegido esta pieza para el nombre del disco?
A: Justo cuando acababa de salir el segundo disco Fiesta, estaba un día escuchando a New Order y pensé que el tercer disco se llamaría Ceremonia. La realidad no tiene mucho misterio y es que me gustaba como quedaba con los títulos de los dos discos anteriores: Romancero, Fiesta y Ceremonia pero también podría ser un pequeño homenaje porque además, era uno de los grupos favoritos de David cuando era un crío.
G: Siguiendo con “Ceremony”, habla de un cambio, de una nueva oportunidad de revelar y seguir adelante, ¿cuál es la intención de este nuevo disco, demostrar quién es La Bien Querida y lo que viene?
A: Partimos de cero. Llegamos a un punto en el que había que dar un cambio o estancarnos y en nuestra situación preferimos arriesgar y dar un giro al sonido. Somos un grupo independiente que nos podemos permitir hacer esto, además la esencia de La Bien Querida que son las canciones y siguen estando ahí.
G: Sin embargo hay algo que permanece y son esas letras melancólicas a las que nos tienen acostumbrados, ¿qué tan complicado fue compaginar la tristeza con la música electrónica?
A: Todos los temas tienen algo de realidad y algo de canción, escribo sobre las situaciones límites del amor. Todas las canciones tienen ese aire melancólico que creo, también caracteriza mi forma de componer y eso no significa que me sienta siempre así. Lo que si que creo es que encaja perfectamente con este nuevo traje electrónico.
G: ¿Están regresando al pasado, revalorando sonidos e influencias que tenían abandonados?
A: Nosotros no teníamos abandonado estos sonidos porque nos hemos dejado influenciar por grupos que nos gustan como New Order, Kraftwerk, The Fall, The Cure... Si supiéramos donde está el futuro iríamos hacia él, pero como lo desconocemos, recurrimos al pasado como la mayoría de los grupos de hoy en día.
G: En su libro El Pop después del fin del pop, Pablo Gil afirma que sería maravilloso un mundo donde los músicos supieran escribir para que no hubiera la necesidad de que existieran los periodistas. ¿Qué opinas sobre esto?
A: ¿No sería mejor que los críticos supieran hacer canciones y dejaran de proyectar sus paranoias en las preguntas que nos hacen?
G: ¿Qué tan complicada esta la situación de los músicos en España en este momento?
A: La situación está complicada en España para todo el mundo, incluidos los músicos. La gente no tiene dinero para ir a conciertos, suben los impuestos y los ayuntamientos tampoco tienen pasta para contratar a los grupos. Nosotros por suerte estamos tocando, el disco ha gustado mucho y no podemos quejarnos demasiado.
G: Describe con una sola palabra la nueva etapa de La Bien Querida.
A: Tecno-Kraut-Pop. Ceremonia es una mezcla del pasado con el futuro, donde se percibe post-punk, krautrock, y mucho tecno. Un evidente tributo a New Order con "A veces ni eso"; Perfección tecno-pop con “Arenas Movedizas”; Elegante synth-pop con "Luna Nueva"; mucho folclore patrio con "Aurora" y una muletilla más contagiosa "Pelea".
Ceremonia de La Bien Querida, es un disco lleno emociones, sintetizadores, sensibilidad; Ana Fernández-Villaverde ha dejado de lado los vestidos largos para enfundarse en colores neón.