Bomba Estéreo son viejos conocidos en Panamérika, los hemos tocado hasta que nos aprendimos sus dos primeros discos y ahora estamos muy contentos de tener un nuevo material para explorarlos. Recién lanzaron su álbum Elegancia Tropical, y en el marco de este lanzamiento, vinieron a México para dar una serie de entrevistas. Aquí presentamos la conversación que sostuvieron con nosotros. Las fotos son de Rodrigo Jardón.
Panamérika: Son cuatro años entre que sacaron el disco pasado y este, y generalmente, en los presskits y todo esto, viene como esta cosa en la que ustedes asumen que maduraron. A mi me llama mucho la atención porque maduraron en un proceso de un chingo de giras, un chingo de actividad y de muchísimas cosas... A nivel de composición para este disco, ¿cómo maduraron con respecto a todo lo que les pasó después del último disco a este?
Li Saumet: Pues, por eso mismo. Yo creo que cuando tú vives experiencias tan fuertes, te obligas a madurar. No sé, cuando la vida te pone situaciones como afrontar responsabilidades, como tomar decisiones, como ser responsable, como levantarte temprano a tocar y todas esas cosas, cumplir con un horario, sacar la cara de la banda adelante, sí te toca madurar. Ósea crecer, responder, no sólo musical, sino emocionalmente, porque también es un proceso súper fuerte en el que estás creciendo: estás creciendo cada vez que viajas a un país, conoces a alguien, ves a una banda... Cada día que pasa, vas creciendo. Pues como en la vida normal pero un poquito más intenso porque, sería lo que uno normalmente viviría en ocho años, se vive en cuatro años, entonces creo que eso nos obligó también a madurar.
Panamérika: Claro. Me llama la atención por ejemplo, que las bandas comienzan como en una especie de experimento entre amigos: "pues vamos a juntarnos, y vamos a ver qué pasa"... Y de pronto, en el caso de Bomba Estéreo, crece, crece, crece, crece, crece, y al rato, - no sé como lo vean ustedes - pero al rato parece una empresa, ¿no? ¿Se vivió así? ¿Hay como, un cambio en la química que tenían al principio a la que tienen ahora?
Simón Mejía: Sí. Digamos, es diferente pero la esencia es la misma. La esencia se ha mantenido y sobre todo porque es una banda que se desarrolla, más que como en una oficina desarrollando estrategias y demás, es como nosotros cuatro tocando en tarimas. Entonces es una cosa muy de performance en vivo, y desde el comienzo esa química entre nosotros todavía se mantiene, digamos que lo hacemos de una manera más grande y tocamos para más público y es más profesional, y la música también ha crecido...Pero la esencia y el gusto por la música, y por la música que nos gusta, ahí se mantiene.
LS: Yo creo que igual es necesario en ese sentido crecer, ya que estamos hablando tanto de la palabra "crecer", porque en un punto, aunque seas muy independiente y aunque hacemos lo que queremos, en un punto, como artista, tú también te tienes que organizar. Hacer una empresa es más que nada para organizarte y que así puedas seguir adelante con tu música, porque si no lo conviertes así, en un momento se va a acabar. Todas las bandas que han durado, es porque se convierten en una empresa y es una empresa que es tu vida, es tu carrera. Hay gente que tú necesitas para que te ayuden. Lo que antes hacíamos nosotros ahorita ya tenemos una oficina que nos ayuda. Hay gente que te ayuda a organizar como, las cuentas, que son cosas que uno no va a hacer porque no las *entiende*, entonces ya uno se concentra más en lo musical y en lo artístico, que es más nuestro fuerte. Y pues la gente con la que trabajamos, como en cualquier oficina y como en cualquier trabajo, es normal.
Sí, recuerdo en un punto decidimos con Simón, "vamos a montar una empresa porque es la mejor manera de mantener este arte - vivo."
P: En la reseña que publicó Felipe Arias para Panamérika, dice que es un disco que se escucha con audífonos porque aunque sí lo puedes bailar, es un disco que es más bien como para saboreártelo.
LS: Sí, yo creo que el disco pasado era más de fiesta y para ponerlo en el carro, y este también lo puedes fiestear, pero sí lo puedes oír en tu casa y tomar los detalles, es un disco musicalmente más evolucionado en ese sentido.
P: Pues sí, tal cual más Elegante. ¿Cómo lo tocan en vivo?
SM: Pues de hecho muchas de las canciones las tocamos incluso antes de que se grabaran, como "Caribean Power", "Para respirar", el mismo "Pájaros"... Como cincuenta por ciento del disco.
LS: Sí, digamos que la mitad. Ahora, tocar todo el disco junto, es una transición en la que estamos porque el disco como set junto, es bastante experimental, y como nosotros estamos acostumbrados a reventar en vivo - que también el disco súper revienta - pero de pronto es una explosión diferente, lo estamos combinando. Ahora toca montarlo entero, que yo creo que puede ser una transición, pero va a ser bonita porque es necesario.
P: ¿Cómo lo pensaron? ¿Cómo fueron haciendo las canciones?
LS: Pues había casi el doble de canciones y cortamos varias porque fueron muchos tiempos, fueron varios años. Entonces habían canciones viejas, y habían canciones que habían pasado de moda y que ya en nuestra mente ni siquiera las ves. Canciones que nunca salieron y que no sé si algún día saldrán, pero que las quitamos porque al final resumimos cada etapa. Nosotros lo percibimos así en varias etapas porque lo vivimos, pero derrepente la gente que lo escucha sí lo ve como un concepto redondo, pero nosotros lo sentimos como que tres canciones son un pedazo, tres canciones son otro...
P: Eso habla de tener un proyecto más allá de un disco, más bien como de banda. Para lograr un disco que sea como un concepto redondo, que termine y empiece, y haberlo terminado así en varias etapas, es que tienes un proyecto, ¿no? ¿Cuál sería ese proyecto?
SM: Pues la banda en vivo, pienso yo. Siempre procuramos que se sienta eso de la banda en vivo, aunque obviamente es difícil lograr capturar esa energía en un disco. Pienso que en cuanto a "redondo" en la manera en que está organizado, ahí sí hay que curar las canciones y saber "estas van por este lado, estas por otro, esta temática es tal..." y entonces se cierra el disco así. Pienso yo que es una onda de presentarse en vivo, tocar en vivo, ese es el fuerte. Pienso yo que hoy en día el disco ya ha perdido su valor, entonces lo que pesa ahí sí es el contacto real con la gente.
P: “Fuego” es una canción muy fuerte, tiene demasiada personalidad. Y el hecho de que haya entrado en FIFA, deja tanto a la banda como a la canción como con una marca. ¿Les ha costado trabajo superar ese hit?
SM: No, para nada. Pienso yo que nosotros nunca lo planeamos como un hit, sino que ya sola se está convirtiendo en uno y nosotros haciendo la música nunca pensamos en eso, simplemente pasó. Pero fue bonito, es una canción a la que le tenemos cariño, entonces no, no fue difícil. En un momento hubo una presión, cuando estaba haciendo el disco porque las disqueras insistían que querían otro “Fuego”, y pues no había de otra más que decirles que no podíamos hacer otro “Fuego”.
LS: Yo creo que se acercaron un poco por una respuesta a eso, que las disqueras también callan un poco la boca a las disquera mainstream que siempre creen que sacar un hit tiene que ser una cosa fuerte. Y en realidad, para mí digamos que en el show hemos visto que “El alma y el cuerpo” es una canción que la mayoría de la gente pide y es una canción súper tranquilita. Porque es que la canción no tiene que ser fuerte. En realidad no hay nada escrito. También pueden poner una canción suavecita y tiene resultados positivos.
SM: Nos gusta el camino largo y difícil. Es el que se disfruta más. El disco yo pienso que de alguna u otra manera tiene sus peros porque en parte es como un "Fuego", es una misma fuerza. Y pues la música cambiaba, no podíamos quedarnos en lo mismo, nada más que "Fuego" es una canción que musicalmente es la primera que yo hice, y podrá tener casi diez años, y la lírica es de hace seis años. Hace diez años mi cabeza estaba en otras cosas.
P: ¿En cuanto tu aproximación a la música, cómo ves la música colombiana ahorita? Después de “Fuego” y el FIFA y todo.
SM: Pues la entiendo mucho más, ya la he depurado un poquito. Hace diez años, cuando estaba haciendo “Fuego”, yo era como un turista dentro de esa música porque ni siquiera es la música de donde yo nací. Y porque en Colombia el folclor y eso es de las costas, entonces yo era como un turista visitando eso. Hoy en día ya es parte de mí, porque he escuchado tanto y he hecho tanto y he visto a tantos músicos, que ya lo asumo como parte de mi, y veo en un proceso similar a la gente que ha crecido conmigo musicalmente, que son los que están en las otras bandas. Ya he notado unas propuestas de fusión mucho más maduras y con un sonido más propio y un sonido nuevo, que no escuchas en ningún otro lugar del mundo, que sólo pasa en Colombia. Es muy interesante.
P: Definitivamente. Es como toda esta escena, en la que forman parte bandas como Pernett, Sistema Solar, Sidestepper, Monareta... que fueron digitalizando las raíces, ¿no?
LS: Sí, en Colombia y en Latinoamérica. Porque también hubieron muchos que sucedieron en Chile, en Argentina… En Perú está Novalima, que son bien buenos.
P: Sí, es cierto. Fue como una explosión de esa década hacia esa parte de las raíces, e incluso creo que fue necesaria.
SM: Completamente necesaria, es ahora lo que identificamos como los latinos que somos.
P: Exacto. Y eso es muy complicado, yo creo que todavía la música anglófona sigue pesando muchísimo.
SM: Sí, siempre porque es una cultura predominante en el mundo.
LS: Pero cada vez la cultura latina influye más, porque digamos que en uno de los países que manda, en cuanto a medios de comunicación, es Estados Unidos, y pues ahí está lleno de latinos.
P: Además creo que también se les está agotando esa música, ya no tienen mucho para dónde ir, ya todo se parece.
LS: Claro, incluso hay muchísimos DJs anglos, que mezclan música latina.
SM: Sí, y esto se ve mucho en el público en los festivales que se flipa con esta música porque es algo totalmente nuevo para ellos, no saben como expresar su cuerpo entonces se enloquecen y se quedan impactados.
LS: También es un poco de todo, porque antes, si se hacía un festival de World music, estaba la música latina pero digamos que muy típica. Y pues era lindo, pero los que iban a escuchar eran señores, papás… Ahora es una música que es latina pero que hay más electrónica y pueden ir más jóvenes. Nosotros hemos ido a festivales en Estados Unidos donde adoran los sintes, adoran la música y cada vez más.
P: El reto entonces yo creo que es, saltar la barrera de la etiqueta de World music, ¿no? Porque justamente, cualquier cosa que sonara africana medio que con aspiraciones londinenses se llamaba World music, y no decía nada…
LS: Cualquier cosa que los gringos no saben cómo se llama, se llama World music. Yo creo que nosotros tenemos cierto modo hecho, y es un poco porque hemos tocado en festivales muy de electrónica, en donde tocaban bandas como Sigur Ros, como Chemical Brothers… pero para una banda que es de cumbia latina, es diferente. Y que pongan en el radio, en las estaciones de música indie, a Bomba Estéreo y que les guste, y que formemos parte de estos movimientos Indie, también creo que es importante y nos gusta mucho, porque nosotros no somos folcloristas, somos de todo. Nos gusta la música electrónica y también hacer un show visual, es un viaje lo que intentamos hacer. Queremos buscar algo que las bandas normalmente no muestran, como cosas que la gente huele y así…eso es un show en vivo.
SM: Porque la cultura latina es así, es sensible. A mí me encanta devolverles a los gringos, a los europeos, el paquete que ellos te vendieron y que acá creció, pero envuelto en algo que es latino, que no es sólo salsa, ni folclor ni nada así.
LS: Pero en esencia y en realidad, es que somos latinos, y nos gusta bailar. No somos rockeros en esencia. No somos electrónicos en esencia. Entonces es esta necesidad de llevarlo a ese nivel también es responsable.
P: ¿Les costó trabajo dar ese salto? ¿Fue una cuestión como de trabajo o fue una cuestión orgánica que se fueran metiendo en todo este rollo de SXSW, en Coachella? Me refiero un poco a esta percepción que se entiende de la música, de lo latino, ¿fue difícil que los asimilaran como parte de…?
SM: Cada vez se van abriendo más. Por ejemplo, hay festivales que visitamos por segunda o por tercera vez, ya que ya no hay como una tarima latina, sino lo mezclan un poquito y tocas pues cuando tocas, cada vez se van abriendo más sillas y siempre están en su posición, sobre todo con el lenguaje.
LS: Yo he visto por ejemplo que se recibe muy bien sobre todo en festivales, porque la gente es muy open-minded, y sí he visto que a la gente sí le gusta la banda, pero siento que todavía les va a faltar el lenguaje. En el sentido que si lo bailan, sí. Pero por ejemplo, las bandas que empezaron con nosotros, bandas con las que nosotros tocábamos, y a los dos años son bandas que cantan en inglés y ya están mucho más arriba. Porque la gente al final entiende, y compran el disco. Es muy difícil que Bomba Estéreo por ejemplo se desarrolle en un mercado anglo o en un mercado europeo, pues porque la gente no le hace un seguimiento, simplemente no hay como entender exactamente. A veces uno se cuestiona, qué tanta influencia tiene la música latina. Es muy difícil todavía para una banda que canta en español, conseguir un mercado en Estados Unidos. Es un mercado únicamente latino y tal vez un 10% anglo.
P: Ok, pues bueno. Ya los voy a dejar ir. Muchas gracias por venir a platicar.