La danza guerrera de Warrior Queen presente en Bahidorá
Foto: Facebook Warrior Queen
Annette Henry, alias Warrior Queen, es una artista jamaiquina formada en la escuela del Sound System callejero en la década de los 80, con especialidad como “deejay” (improvisadora lírica) en el estilo dancehall. Durante su evolución musical en las décadas subsecuentes desarrolló una impactante presencia escénica que complementa con letras incisivas que critican los problemas mundiales generados por las guerras y tiranías de los sistemas políticos (Babylon), pero también expresa mensajes esperanzadores de amabilidad entre las personas.
La poderosa voz de Warrior Queen es un puente entre la tradición jamaiquina de la improvisación y los estilos electrónicos europeos que van del dub al grime, pasando por el dubstep y jungle. En el año 2000 emigró a Inglaterra y generó una prolífica serie de colaboraciones con los productores The Bug, Skream, Vex’d, Mungo’s Hi-Fi, Sunship, Sarantis, Kalbata, O.B.F, Dub Gabriel, Kush Aurora, Sam Binga, Jahrkon y Schlachthofbronx. Muestras representativas de su estilo crudo de conciencia social se pueden escuchar en los cortes Poison Dart, Insane, Aktion Pak, Dem A Bomb We y Almighty Father.
El reggae, dub y dancehall definen a Jamaica como un lugar único en el mundo para el desarrollo y evolución de la música. Este fenómeno ha provocado que los productores más representativos en occidente de la música bass generen una sinergia colaborativa con artistas forjados en esta isla del caribe. En consecuencia, estos artistas terminan diseñando sonidos que rompen con las etiquetas del mainstream de las listas de éxitos, traspasando los límites de la creatividad al máximo, con resultados extrasensoriales que provocan realidades de ciencia ficción en lo sonoro y extendiendo los principios de realidad a través de las líricas.
La propuesta de Warrior Queen es un acto que pone en perspectiva la tendencia de la música electrónica mundial del siglo XXI y que debe ser apreciado en esta oportunidad en su visita a México en el carnaval de Bahidorá. Sin duda tiene mucho que aportar a la cultura musical de las audiencias, desde la perspectiva del sound system, dancehall y la tecnología del sonido.
El dance floor del carnaval se estremecerá con la buena vibra y los mejores pasos de los asistentes. Es fácil predecir que de esta sesión del Bahidorá surgirán nuevos talentos de la producción musical mexicana.
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