Vintage909: Silent Alarm, una necesaria provocación

El mundo pintaba muy negro a principios de 2005: George Bush acentuó su ofensiva contra Irak y el tsunami que azotó Indonesia dejaba un rastro de más de 200 mil muertos. En terrenos menos hostiles, la cosecha también parecía perdida: los excesos de Doherty y Barat terminaron destrozando la permanencia de una banda que prometía convertirse en la salvadora del siempre agonizante rock n'roll.

Si en Inglaterra rodaban cabezas y los ecos de “Time for Heroes” dejaban de escucharse, el arribo de alguien que ayudara a resistir las turbulencias que se avecinaban resultaba imperante. Curioso que aquel que intentara llevar la cultura pop a tierras más firmes no sería precisamente el típico inglés de cabello castaño y cálida voz. La tarea la emprendió un hijo de inmigrantes nigerianos con voz temblorina llamado Kelechukwu Rowland Okereke.

 

Bloc Party irrumpió como sismo en la escena musical y mientras las pistas de baile y las salas de conciertos se llenaban, nadie atinaba a etiquetarlos. “¿Quiénes eran? ¿Era punk disfrazado de dance? ¿Eran los nuevos Franz Ferdinand?”, se preguntaron ingenuamente unos a otros.

Su álbum debut Silent Alarm vio la luz en febrero de 2005. El nombre del disco tuvo que ver con un artículo de revista que describía un sistema de emergencias que detectaba con minutos de anticipación la llegada de tsunamis. La alusión también pudo ser interpretada– y esto sólo lo podemos decir ahora – como una alerta al cambio cultural que estábamos por experimentar.

Su estructura musical le da prioridad a la base rítmica. Los constantes lamentos de Kele en el micrófono, con la batería de Matt Tong marcando el paso a un ritmo vertiginoso y la guitarra de Russell Lissack, que podía experimentar entre compases, les otorgó un sonido único. Todo esto bajo la mano del experimentado productor Paul Epworth, quien años después produciría el éxito de Adele, “Rolling Into Deep”.

Bloc Party.

En ese tiempo, los singles de muchos artistas empezaban a rebasar el tonelaje de la obra completa, lo que terminaba rompiendo el equilibrio. Caso contrario sucedió con Silent Alarm, en el que cada track se amoldaba perfectamente con el anterior creando una sólida pieza para disfrutarse de principio a fin. Okereke categorizó su sonido como “technicolor”, una descripción ambigua con la que sólo se podría deducir que el álbum era el resultado de una amplia gama de tonalidades auditivas.

De manera sutil, el disco sirvió como protesta por la guerra en Medio Oriente con canciones como “Price of Gas” y un espíritu anti-Bush que se reflejaba en líneas como:

“He's born a liar, he'll die a liar // Some things will never be different //Just like his dad, just like his dad”

Helicopter- Silent Alarm (2005)

               

 

A mediados de julio de 2005, Bloc Party vendió más de 120 mil copias de su álbum debut en EU y se empezaba a cocinar una serie de remixes a cargo de artistas como Ladytron y Nick Zinner. Sin embargo,  los ataques terroristas en el Metro londinense que dejaron más de 50 muertos y 700 heridos empañaron las celebraciones de la banda. Una semana después de los atentados, “The Pioneers” tercer sencillo de la placa se puso en circulación. Además, Kele escribiría una canción referente a lo sucedido que se incluyó en el segundo disco de la banda, A Weekend in the City (2006).

La personalidad tímida de Okereke, su desprecio por el comportamiento del rockstar prototípico y su inclinación por la música dance, quedaron plasmadas en Silent Alarm. Lamentablemente, el héroe que la industria musical necesitaba empezó a sentirse abrumado: “Odiaba ser entrevistado, odiaba las nuevas bandas con las que nos comparaban, odiaba el hecho de caminar en la calle y mirar a algún tipo con pantalones entallados cargando una guitarra”, declararó el cantante. Posiblemente la depresión de su líder ha provocado que la banda entre en periodos intermitentes de hibernación. Sin embargo salvar al rock n'roll no es una empresa fácil.

Pueden disfrutar del Silent Alarm en su totalidad a través de Vintage 909 el sábado 6 de junio a las 6 de la tarde, presentado por Lothar Torres. 

 

 

DING DONG POCAJU 5 de JUNIO

"Bailando, bailando. Amigos, adiós. Adiós, el silencio loco"