El pasado 13 de noviembre, The Wookies presentaron oficialmente su nueva producción discográfica, Darkoteca, y el recinto seleccionado para este festejo fue SALA, un espacio que se ha establecido como un favorito para conciertos en el DF. Era una noche extraña para ir a un concierto, pues horas antes se habían perpetrado distintos ataques terroristas en la ciudad de París y uno de ellos fue la irrupción a mano armada al Teatro Bataclan mientras la banda Eagles of Death Metal ofrecía un show. Hasta ese momento, se presumía la suma de más de 100 muertos dentro del teatro. Sin embargo, afuera del SALA el ambiente no era tenso ni podía resentirse lo ocurrido en Francia, los presentes estaban demasiado ocupados en sus celulares y cigarros antes de entrar.
Ya dentro del recinto y pasadas las 10 pm, salió Simpson Ahuevo como primer invitado. Esta era la tercera vez que yo veía a The Wookies en vivo y en las tres ocasiones el rapero originario de Hermosillo ha sido el acto abridor o ha compartido el escenario con ellos. Si bien este personaje nunca ha sido de mi agrado -pues veo en su trabajo rimas muy básicas y una interacción con el público a base de demasiadas groserías sólo para demostrar su “rudeza” (eso estaba bien para Control Machete y Molotov en los noventa)- ha acumulado una cantidad de fanáticos fieles que corean y se desgarran con sus canciones y tres o cuatro hits capaces de que más de un despistado los reconozca. Con un set de alrededor de catorce canciones, Simpson dejó prendidos a sus fans (poco menos de la mitad de los asistentes) y a otros nos dejó desesperados.
Posteriormente, se empezaría a montar un equipo distinto en el escenario y algunos pensamos que era para el grupo principal, pero nos equivocamos. Un Dj que se hace llamar BBY JSS se encargó de amenizar la espera con un set bailable y más a tono con el sonido de The Wookies. Esta era una buena propuesta para anteceder a los autores de “Nocturnal”; sin embargo, generó un poco de exasperación al hacernos entender que saldrían después de la medianoche. Era comprensible, así como el concepto de Disco Tecno EP (2011) es un viaje a Acapulco, el de Darkoteca es la llegada a una ciudad postapocalíptica llena de mujeres y fiesta, algo que se disfruta mejor en las madrugadas. Un buen concepto y una buena idea para adaptar en un acto en vivo, sólo que mal ejecutado al postergar demasiado su salida al escenario con artistas de relleno.
En el ambiente había cierta impaciencia y los gritos de “Ora pinches vergas” y “Culeros” no se hicieron esperar, todo mientras empezaba el montaje del equipo entre una cantidad excesiva de humo que preparaba una llegada estilo nave espacial. Eran las 12:16 am cuando al fin The Wookies pisaban SALA, con un volumen mucho más alto que con el que tocaron sus predecesores. El único grito que ahora se escuchaba era el “grito wookie”, o sea, el uhh uhh de “Disco tecno”, su canción más representativa.
El set empezó con varias piezas ya bastante conocidas por los asistentes como su remix a “In México” (original del Eddie Mercury), “Costera Miguel Alemán” e “Infernus”. Fue en la segunda canción mencionada cuando comenzaron los primeros problemas de audio, pues uno de los sintetizadores parecía hacer falso contacto y generaba un sonido desagradable. Dicha falla casi logra que el grupo deje de tocar hasta que se arreglara el contratiempo, pero el público no permitió que se siguiera postergando la fiesta y corearon el “grito wookie” para sostener el ritmo con el que había empezado el concierto, alentando al grupo a no hacer paradas de emergencia.
Sonaban solamente canciones del primer EP y nada del nuevo material. Esto no era sólo para mantener prendida a la gente con canciones familiares, pues parecía que el mensaje por parte de The Wookies era hacer un recorrido por lo ya conocido y luego dar paso a la producción que nos reunía esa noche. Pensaba en esto mientras se proyectaban visuales de una playa noventera, y cuando sonaron los primeros beats de “Disco tecno” confirmé mi idea. Al finalizar esta canción agradecieron la notable presencia de “vergas y papayas” y comentaron que el concierto estaba siendo grabado. Después dieron paso a lo contenido en Darkoteca.
Si bien eran canciones que el público aún no reconocía al cien, la inercia del principio del set mantuvo a todos bailando a pesar de un cansancio notable en la mayoría de los asistentes y las constantes fallas de audio. Más de una hora de nuevos tracks y sencillos como “Nocturnal” y “Patrick Millah” agotaron de manera justa en una verdadera celebración por la salida de un nuevo álbum de The Wookies.
Cuando sonó “Ora pinches vergas”, el furor regresó a la gente para demostrar que ésta se convertirá muy pronto en otro himno del grupo enmascarado; si bien no llegó como invitado Silverio -con quien colaboraron en el track para el disco-, el frenetismo entre el público le devolvió a SALA la energía que faltaba para el final: el remix a “Living On Video” de Trans-X, una canción ya recurrente en su set con la participación del líder de Trans-X, Pascal Languirand. Sin embargo, el canadiense fue otro ausente (también habían anunciado la presencia de María Daniela y su Sonido Lasser y nunca apareció).
A la 1:55 am llegó el encore. La gente gritaba sus peticiones y el grupo salió ahora sin máscaras tras casi dos horas de concierto dentro de esas cámaras de calor. Dijeron que tocarían dos canciones más y el cierre sería con el remix a “Toro” de El Columpio Asesino. Todos cantamos “Te voy a hacer bailar toda la noche” y parecía una promesa creíble en tanto la música de The Wookies siguiera sonando, nadie pensaba rendirse a pesar del cansancio antes de que todo llegara a su fin, hecho que sucedió con un remix más, ahora a “Bailando” de Paradisio, el hit noventero mejor conocido como “El silencio loco”. “Bailando, bailando, amigos adiós, adiós” era como se despedía el grupo, realmente fue una noche de baile. Vinieron los agradecimiento y las selfies desde el escenario. Eran las 2:18 am.
Al parecer, la fiesta siguió con BBY JSS pero sólo los más valientes se quedaron. The Wookies no decepcionaron, a pesar de todos los retrasos y las fallas. La calidad de cada una de sus canciones se impuso a los errores y demostraron porqué son uno de los representantes masivos más importantes de la escena electrónica mexicana.
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