El silencio es una comodidad con la que los conciertos modernos no cuentan. No es crítica ni queja, finalmente, si alguien quiere gastar 1000 pesos en la presentación de un artista del cual se conocen tan solo dos canciones y el resto del tiempo se tomen fotos o se cotorree con los amigos, es decisión de uno. Como ejemplos recientes podemos tomar los recientes actos de Alt-J y Devendra Banhart en El Plaza Condesa, donde el parloteo igualaba el sonido de la música. Definitivamente el silencio en un concierto es una cosa muy individual y particular, mientras una ejecución en vivo de Devendra sí sería mejor en un cómodo silencio, el escándalo suele adornar esas brechas vacías que dejan las grabaciones de estudio. ¿Se imaginan una presentación calmada de Oasis o Nine Inch Nails.
La propuesta #SilentConcerts es tan sui generis como es agradable. De la promotora Ordinary People, esta iniciativa es idónea para una época donde el silencio que se pide de manera implícita en algunos eventos suele ser quebrantado. Asimismo, Alexi Murdoch fue la propuesta ideal para echarla a andar. Murdoch es un cantautor escocés de folk sencillo, algo melancólico y (qué mejor) silencioso. Su música se transmite como pequeños susurros que llegan al oído con delicadeza. Al platicar con él sobre la iniciativa respondió:
La respuesta osada sería decir que el silencio es el resultado de la música
Anoche tuvo lugar el primer #SilentConcert, y Alexi Murdoch demostró que esta iniciativa no es cuestión de imponer el silencio, sino de generar una experiencia alternativa, de apreciar la ejecución y el virtuosismo musical en un contexto diferente. El hecho de que la música sea en vivo, exige que los participantes tengan una participación. No obstante, #SilentConcerts no se trata de criticar y destruir, sino de proponer algo diferente y recuperar un ambiente que usualmente no se toma en cuenta. Es entender la modernidad, comprender que los tiempos cambian pero siempre se buscan alternativas diferentes que buscan un espacio de diálogo y conversación con el resto.
Sobre el silencio y amenidad en los conciertos el mismo Murdoch dijo en entrevista:
Las personas estamos inundadas con nuevas tecnologías que crean problemas con nuestra atención y habilidad de estar quietos. No nos dejamos llevar por existir en un presente sin necesidad de capturarlo y subirlo a una red social para validar el hecho de que estuvimos ahí.
Y es muy cierto. Todos estos distractores usualmente rompen una barrera de respeto que debe haber entre los artistas y el público. Es una cuestión tácita y tiene mucho que ver con quién esté sobre el escenario. El silencio no aplica para todos aquellos dispuestos a hacer una presentación frente a cientos de personas, pero #SilentConcerts demuestra la importancia de una ejecución calculada con tranquilidad y silencio.
Texto originalmente escrito para Publimetro del viernes 24 de enero del 2014.