En plena génesis de 2019, el pasado 10 de enero, unas misteriosas señales de radio provenientes de otra galaxia fueron captadas por los telescopios del CHIME Observatory, ubicado en el Valle de Okanagan, en la Columbia Británica, Canadá. Hasta el día de hoy no se tiene certeza de qué objeto emitió las ondas, pero se están barajando distintas hipótesis, incluida la de un origen artificial por una civilización inteligente.

Las señales, llamadas ráfagas rápidas de radio o FRB (por sus siglas en inglés), que son pulsos de radio fugaces, durando apenas unos milisegundos, pero de mucha intensidad, fueron detectados por los astrónomos del observatorio. Las pulsaciones se repitieron un total de 13 veces y su origen se determinó a unos mil 500 millones de años luz en alguna galaxia distante.

Es apenas la segunda vez en la historia que este tipo de señales son captadas por telescopios humanos, lo que sugiere que a pesar de ser difíciles de encontrar, es posible que existan más de ellas.

En palabras de Ingrid Stairs, astrofísica de la Universidad de British Columbia:

“Saber que hay una señal más sugiere que puede haber incluso más allá afuera. Con más repetidores y más recursos utilizados en los estudios, podremos eventualmente comprender este rompecabezas cósmico; saber qué son estas señales y qué las causa”.

Las hipótesis

Entre las teorías que se barajan sobre el origen de estas señales están principalmente las estrellas de neutrones, remanentes estelares de estrellas supermasivas que colapsaron después de agotar su combustible y explotar como supernova.

Las estrellas de neutrones suelen tener entre 1.5 y 2 masas solares en diámetros de apenas 12 kilómetros. Estas estrellas giran a una velocidad extremadamente rápida y su increíble densidad las hace uno de los objetos más calientes del universo. Este mismo fenómeno hace que generen un campo magnético tan fuerte que sería capaz de producir este tipo de señales.

Otra teoría que se encuentra sobre la mesa es la de un agujero negro supermasivo, que en teoría, al devorar objetos de gran masa, también podría ser capaz de producir este tipo de señales.

Por último, aunque sea la posibilidad menos analizada, también se cree que estas señales de radio podrían haber sido producidas por una civilización inteligente con una tecnología capaz de emitir señales de radio extremadamente potentes.

Y aquí llega la pregunta. En caso de que hubieran sido creadas por una civilización inteligente…

¿Estarán diciendo algo?

¿Podría ser algún tipo de mensaje o simplemente son señales emitidas con otro propósito que por mera coincidencia fueron captadas en la Tierra?

Aunque lo descubriéramos, esas señales habrían sido emitidas hace mil 500 millones de años, muchísimo antes de que los dinosaurios poblaran la Tierra, así que casi con toda certeza, cualquier civilización que las hubiera emitido habría desaparecido hace mucho tiempo. De cualquier manera, con el progreso de nuestra tecnología, cada día estamos más cerca de descubrir el origen de este tipo de señales y qué las emite: comprender qué significan en este cosmos lleno de preguntas aún sin resolver.