El catorce de febrero se acerca. Ese olor a rosas al mayoreo y bombones comienza a invadir el aire y tú afortunadamente (o desafortunadamente) sí tienes a alguien con quien compartir esta fecha. El problema no es conseguir pareja, sino saber qué regalar. Es por eso que antes de que gastes tu dinero en un puerco vietnamita o alguna otra excentricidad, te damos una lista de las cosas que es preferible no se materialicen en forma de regalo si es que no quieres pasar del día del amor al de la amistad.
1. Tarjetas compradas
No hay nada más triste que alguien que en teoría te considera único y especial, te regale una tarjeta genérica del aparador de una tienda departamental con una frase cursi y la imagen de un gatito diciendo “I Love You”. Si ya de plano te decidiste por una tarjeta, pues mínimo que traiga un billete o una tarjeta de iTunes.
2. Post-its
Sabemos que la experiencia Post-it fue en su momento sumamente gratificante, sin embargo hoy en día este fenómeno social ha pasado de ser conmovedor y original a dar pena ajena. Llenar el coche, casa o la oficina de alguien con papelitos se ve ya como un acto desesperado de atención. Poniéndolo en términos animales, parece una manera de marcar territorio de manera colorida y patológica.
3. Manualidades
En muchas ocasiones nos dejamos llevar por la idea de que lo mejor es regalar algo que hayamos hecho con nuestras propias manos, pero la realidad es que es un fracaso porque la mayoría de veces no somos tan hábiles o simplemente nuestras decisiones artísticas no son las mejores. Así que a menos que confíen totalmente en su potencial a la hora de hacer manualidades, abstenganse o podrían terminar regalando un cupido hecho con un rollo de papel de baño, adorable ¿no creen? (Puede ser que en estos casos sea mejor dar una tarjeta del Sanborns).
4. Impresiones románticas
Este día es para celebrar y presumir a tu ser querido, eso está claro. Lo que no, es el hecho de recurrir a la dolorosa técnica de regalar artículos con tu cara y la de tu pareja, entiéndase por artículos: tazas, playeras, rompecabezas, pines, sudaderas, gorras, etc. Por más barato y rápido que sea, simplemente no lo hagas. Sinceramente él (o ella) nunca saldrá a la calle con una playera de corazón con su foto juntos... Igual y sólo si va a jugar gotcha o a pintar una pared. Así que mejor ahórrate el esfuerzo y mantente alejado de lugares de impresión.
5. Lencería lujuriosa
Suele pasar por la cabeza de muchos (hombres sobre todo) que el mejor regalo es una fina pieza de lencería para su pareja. Y no neguemos que en ocasiones puede ser algo divertido y provocador, pero hay que tener cuidado. El hecho de regalar lencería es de alguna manera un autoregalo pues el que disfruta viéndola y quitándola es uno. Así que debes tener mucho tacto para hacerle saber a tu amado (o amada) que no sólo buscas sacudir el colchón, sino encender la llama de la pasión.
6. Motelazo
Por donde la veas intentar llevar a tu pareja a un motel en esta fecha no es algo recomendable. Podrá ser emocionante en alguna otra ocasión, pero en esta fecha lo ideal es concluir la noche en algún lugar íntimo sin un historial de fluidos a tu alrededor. Es preferible irte de weekend a algún pueblo mágico, rentar unas cabañitas, prender unas velas y poner música, a estar en un cuarto al lado del periférico donde la única fuente de entretenimiento sean canales porno.
7. Peluches
A menos que tu pareja tenga hijos, un peluche definitivamente es un no rotundo. Por más tierno que se vea en el exhibidor, ese osito terminará arrumbado lleno de polvo y sin cumplir su función existencial de ser abrazado y querido. Así que más que por ti, hazlo por ese pobre peluche que terminará sus días en un armario asfixiándose en su propia soledad.
Por Lenny López (@ElPepinazo)