Toma de la CNDH en la Ciudad de México ya no es la única
Ante la ineficacia del organismo de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para atender los casos de víctimas de violencia, desaparición forzada y feminicidios, durante la última semana se desató una ola de protestas a nivel nacional en diversas de sus sedes. Hasta el momento, colectivos feministas y familiares de mujeres desaparecidas y víctimas de feminicidio, han clausurado simbólicamente las sedes de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en Michoacán, Veracruz y Aguascalientes, replicando la toma de las oficinas de la CNDH en el Centro Histórico de la Ciudad de México que se ha llevado a cabo desde el pasado 3 de septiembre. Cabe recalcar que todas se han tratado de protestas pacíficas.
Cuatro días después de la toma de la CNDH en la CDMX por parte de familiares de las víctimas y activistas feministas en exigencia de justicia, se realizó la primera clausura simbólica en Aguascalientes, es decir que las instalaciones no han sido ocupadas. Sin embargo se han realizado actos alegóricos como muestra de solidaridad a las manifestantes feministas del colectivo “Ni Una Menos”, que mantienen tomadas sus oficinas en la capital. Se cubrió el establecimiento con cinta amarilla en la que se lee “Prohibido el paso”, se escribió en una pared “Nilda presidenta” y de igual forma se colocaron imágenes de Francisco I. Madero intervenido, así como del presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, asemejándose con pinturas en la toma de las oficinas de la Comisión en la CDMX. Sumándose al movimiento, activistas de los estados de Aguascalientes y Veracruz colocaron fotografías de las víctimas, carteles de búsqueda y letreros en las entradas de las oficinas de las comisiones. El Observatorio de Violencia Social y de Género de Aguascalientes respaldó la toma de las instalaciones en la Ciudad de México y exigió garantías de no represión a las autoridades ante los actos de protesta.
Ahora bien, el jueves 10 de septiembre, el colectivo feminista “Mujeres de la Periferia” iniciaron la toma de las instalaciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos en Ecatepec, Estado de México (COHDEM). Alrededor de 20 mujeres y seis niños llegaron a las 2 de la tarde a iniciar la toma, según Erika “Kika” Flores, quien encabeza la toma para Animal Político. Entre las exigencias de las manifestantes está la petición de la renuncia de Grisel Barrientos, directora del Instituto Municipal de la Mujer, y de Sandra Pacheco, del Centro de Justicia para las Mujeres.
Sin embargo, la respuesta por parte de las autoridades, a diferencia de los otros estados, tuvo un carácter totalmente represivo. Fue alrededor de las 12:00 a.m. que entraron a la fuerza personal de la fiscalía y policías municipales de Ecatepec para ejercer presión y desalojar a las manifestantes que se encontraban dentro de las instalaciones. Es importante destacar que se contaba con la presencia de infantes y una mujer embarazada de 8 meses. Once mujeres, entre las cuales se encontraban menores de edad, fueron trasladadas en vehículos no oficiales al Centro de Justicia de Atizapán. Actualmente, movimientos y colectivos como Girl Up México, Raíces de Rebeldía, Manada Periferia, entre otros, se han encargado de difundir en redes sociales que tanto las mujeres que fueron arrestadas como las que se encuentran manifestándose, han sido golpeadas y rociadas con gases por elementos de la policía.
Estos acontecimientos ocurridos en la madrugada representan una normalización de la violencia como método de represión por parte de las autoridades, consecuencia de la criminalización de las protestas feministas. Este viernes 11 de septiembre el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, a través de Twitter, se declaró en contra de las acciones llevadas a cabo por la fiscalía del Estado de México.
*Con información de Fernanda Amézquita
