La película de la semana: 'Leto'
El cine siempre parece ser mucho más que las historias que se cuentan en las películas. Los personajes y las tramas, los argumentos y sus giros normalmente resultan mucho más que simples elementos dramáticos. Así, una cinta de época es un excelente vehículo para, a partir de una recreación del pasado, hablar de lo que sucede hoy del mismo modo que las vicisitudes a las que se enfrentaron los músicos más destacados de la movida contracultural del Leningrado de los ochentas sirve para hablar de los ataques a la libertad de expresión en nuestros días.
De todo eso y más trata Leto: Un verano de amor y rock. Película metáfora y espejo de la realidad del cineasta ruso Kirill Serebrennikov que, hasta hace uno par de meses, vivía en arresto domiciliario en Moscú bajo una acusación de malversación de fondos públicos. Cómo sucede en muchos lados, detrás de los cargos se esconden, según buena parte de la comunidad cultural rusa, una censura velada sobre las opiniones y críticas de un cineasta incómodo para el régimen.
Luego entonces, no sorprende que una compleja y nostálgica postal de la escena underground del rock ruso de hace casi cinco décadas hablé también de lo que sucede hoy en los territorios gobernados por un todopoderoso Putin.
Musical inclasificable y triángulo amoroso irrepetible el nuevo trabajo de Serebrennikov es una cita ineludible en la cartela comercial. Corran a verla
