Hacer un proyecto musical ligeramente inclasificable parece ser necesario para el éxito. The Hics es una agrupación cuyo sonido abarca varios espectros y no se queda conforme con una exploración individual, más bien realiza amalgamas sónicas capaces de evocar a diversas bandas, productores, disqueras, géneros y hasta países.
Al empezar a escuchar su más reciente EP, Tangle (SQE Music, 2013), y su canción homónima, uno puede distinguir ese sonido downtempo que permea tantas producciones de hoy, remitente a productores como James Blake o a los beats de Burial. Voces reverberadas, puestas una contra otra como con el fin de sabotearse entre sí, pero creando una armonía psicodélica, es uno de los elementos definitivos de Tangle, el cual permea todas sus composiciones.
[soundcloud url="https://api.soundcloud.com/playlists/6971731" params="auto_play=false&hide_related=false&visual=true" width="100%" height="300" iframe="false" /]
“Cold Air” perfecciona la vena etérea y es un producto más frágil, como si su sensación onírica fuera fácilmente perturbable. “Russian Dolls” mantiene un entorno de soul y ritmos sincopados, a la par de un dúo vocal en imperfecta sincronía. “Lines” es el fin de este cóctel digital. Con 6 minutos de duración, este corte abarca dub, reggae y una leve tropicalidad con instrumentos de viento y sus sintetizadores ensoñadores.
The Hics podrá no ser la piedra angular de la música, pero este sexteto moldea la misma roca que siempre escuchamos para entregarla de una manera novedosa y fresca, desde voces traslapadas con ambientes digitales, hasta sus ondas exóticas y ritmos tropicales.